En esta entrada te mostraré tres lugares que no pueden faltar en tu visita a Italia.
1. Arco de Constantino
El Arco de Constantino es uno de los monumentos mejor conservados y además es el más moderno de los arcos de triunfo que se realizaron en la Antigua Roma. Tiene una altura de 21 metros, una anchura de 25 y está compuesto a su vez por tres arcos. En los relieves del monumento, realizado con bloques de mármol, se pueden ver estatuas extraídas del Foro de Trajano y algunos relieves en los que aparece Marco Aurelio repartiendo pan entre los pobres, además de la representación de Trajano tras su victoria frente a los Dacios. La inscripción de la parte superior, realizada originalmente en letras de bronce, dice lo siguiente: "Al Emperador César Flavio Constantino, el más grande, pío y bendito Augusto: porque él, inspirado por la divinidad, y por la grandeza de su mente, ha liberado el estado del tirano y de todos sus seguidores al mismo tiempo, con su ejército y sólo por la fuerza de las armas, el Senado y el Pueblo de Roma le han dedicado este arco, decorado con triunfos".
2. Santa María del Fiore
La Catedral de Florencia, también conocida como Santa María del Fiore, se ubica en Piazza del Duomo, su construcción comenzó a finales del siglo XIII bajo diseño de Arnolfo di Cambio, un arquitecto y escultor amante del estilo gótico. La catedral cuenta con una nave principal y con dos naves laterales además de un ábside trasero. Cuando di Cambio falleció, la construcción de la catedral se postergó y fue retomada en 1334 por Giotto quien diseñó el campanario. Sin embargo, la construcción se volvió a interrumpir en 1337 con su fallecimiento. La construcción de este magnifico proyecto continuó con Andrea Pisano y Francesco Talenti finalizando su construcción en 1359. El Campanile de Giotto tiene 85m de alto y es posible subir a la cima a través de sus 414 escalones desde donde es posible apreciar una vista maravillosa de Florencia. A mediados del siglo XIV, los artistas florentinos dejaron de lado el estilo gótico e incorporaron el estilo romano. El aire gótico de la catedral quedó escondido detrás del mármol rojo de Siena, el blanco de Carrara y el verde de Prato. El orfebre Lorenzo Ghiberti y el escultor Filippo Brunelleschi tuvieron el privilegio de finalizar la Catedral de Florencia. Brunelleschi esculpió las estatuas para el Duomo y diseñó un innovador proyecto para hacer de la Catedral florentina la más grande de su tiempo. Brunelleschi inició con la construcción del proyecto y para el año 1421, la base en forma poligonal ya se había completado mientras la cúpula fue terminada 15 años más tarde. La roja cúpula de la catedral fue en ese entonces la más grande del mundo, con 45m de diámetro y 100m de altura y muy pronto se convirtió en el símbolo de Florencia.
3. Plaza Venecia
Es un gran conjunto monumental construido tras la unificación de Italia, su construcción fue íntegramente planificada por Mussolini, motivo por lo que, algunos romanos no les agrada esta plaza pues no eran simpatizantes de él y de sus ideas y también es motivo de disputa entre los habitantes de Roma porque esta plaza destruyo parte de las ruinas allí encontradas. En esta plaza se encuentra un monumento a Vittorio Emanuele II, conocido popularmente como el Vittoriano y lo más característico de esta plaza es su Palazzo Venezia, un edificio renacentista de color blanco, que da nombre a esta famosa plaza y que en su balcón principal, Benito Mussolini ofreció algunos de sus discursos más importantes. Pertenece al estilo de finales del siglo XIX. Es una estructura de 135 metros de ancho por 70 de altura, coronada a ambos lados por sendas esculturas de la diosa Victoria guiando a las cuadrigas. Actualmente en él, podréis ver imágenes de Rómulo, Remo y la loba y es la actual sede de la Biblioteca del Instituto de Arqueología y de Historia del Arte de Roma.